La Quinta Anauco tiene su origen en el año de 1796. El Capitán Juan Mijares de Solorzano ordena la construcción sobre unas tierras pertenecientes a los Condes de San Javier y a los Marqueses de Mijares. Con el terreno que adquiere de los herederos de Don José Antonio Fortique.
Para el año 1812 habitaba la mansión Doña Maria Jerónima de Tovar, y su hijo Don Miguel Mariano Mijares de Solórzano (esposa e hijo). Ese año de 1812, durante el terremoto que azotó a Caracas, la casa no sufrió ningún daño. En 1821 debido al triunfo de la independencia, esta familia se ve forzada a irse a Curazao y la casa es traspasada a Bienes Nacionales.
En 1825 es arrendada al General Francisco Rodríguez del Toro, Márquez del Toro, cuando fallece el inquilino anterior el General Zaraza. Márquez del Toro adquiere la Quinta Anauco a instancia de Bolívar y la habitó hasta el año de 1851 cuando muere. Entonces la quinta la hereda su sobrina María del Rosario Herrera y Toro. Quien la vendió a su tía Doña Gertrudis Toro de León y esta a su vez a la familia Eraso, en el año 1861.
Su arquitectura
La quinta Anauco es una construcción de base rectangular con techos de tejas a dos aguas, salones, habitaciones, cocina, y patios interiores. Su forma obedece además a los criterios de las casas de campo. La utilización de columnas, aleros, ventanas, corredores dan respuesta adecuada a las condicionantes del lugar: topografías, clima, vegetación, que hacen de la casa un refugio dentro del ambiente..
Actualmente funciona allí la sede del Museo de Arte Colonia. Importantes colecciones de pinturas: cuadros de Francisco José Lerma y Villegas, José Lorenzo Zurita, Juan Pedro López y la Escuela de los Landaeta. Además presenta orfebrería, bronce, hierro , marfil, hueso, nácar y del mueble barroco. Mencionándose también sus jardines adyacente de gran belleza y exuberancia.
La quinta Anauco fué decretada Monumento Histórico Nacional el día 25 de enero de 1978
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